miércoles, 11 de abril de 2012

Footprints...

De pequeña le agarraba con fuerza las manos a mis mejores amigos/as y les decía "para siempre", está claro que de pequeña era inocente como cualquier otra niña de mi edad, poco a poco un amigo se fue convirtiendo en el reflejo del alma, en el regalo más grande que podía tener una persona, un logro de felicidad, que cuando pasabas tiempo con ellos te dieras cuenta o no, sujetaban tu vida, de pies a cabeza, y con la raíz en el corazón...
Pasa el tiempo y las diferentes etapas, pasan cosas que ni te hubieras imaginado que podrían pasar,  cambiamos la actitud pero permanecen los recuerdos... Estamos creciendo y si algo se ha demostrado es que para ser cada día más grande tienes que caer y levantar, tienes que cometer errores (porque no existe alguna persona que no los cometa), y de ahí la enseñanza, el ser mejores personas poco a poco porque sabemos que si pisas un charco una vez, procurarás no volverlo a pisar, y también las consecuencias, nadie pisa charcos sin pringar...
¿Mis esperanzas? un charco seca, el alma humedece...
Poco a poco nos damos cuenta que decir perdón no es excusa alguna para que seque lo antes posibles, y reconocemos que solo estaremos mejor cuando te perdones a ti misma y cuando con mucho dolor dejamos que esa lluvia que cayó siga su curso adonde ella quiera, y que seguramente me quedaré cada día, cada segundo de mi vida esperando a volver a ver la misma gota de agua con la que un día y sin yo darme cuenta, fue mi sostén.
Una amistad puede tener puntos,comas,rayas, barras, espacios, guiones, excepciones... pero me niego a que exista un punto y final.